La utopía del voto nulo en los procesos electorales

Hola a todos
Desde hace mucho tiempo, vengo pensando en la viabilidad de lo que paso a exponer. Me encantaría recibir otras voces sobre este tema, para poder asentar las ideas y elaborar un artículo más ponderado.
Cuando en una crisis como la que venimos sufriendo hace unos años, llega el momento de cualquier proceso electoral, puede ser que nos sintamos confusos y con dudas, sobre la idoneidad de los candidatos y la veracidad de sus programas.
A priori, podemos pensar que las derechas carecen de sensibilidad social, también que las izquierdas no son capaces de crear un plan económico que sea viable. Y si hablamos de los partidos ó formaciones minoritarias, por muchas simpatias que lleguen a despertar, nuestro eventual apoyo no les serviría para mucho, mientras no se cambie la vigente Ley Electoral.
Nos encontramos además con un elemento cada vez mayor, que convierte cualquier proceso electoral en una farsa. Me
refiero a la abstención, la cual puede quedar explicada en gran medida por el desencanto (sin olvidar la incultura, la desinformación y la ausencia muy generalizada de una conciencia social).
Es entonces cuando me viene a la mente la utilización del voto nulo como un arma demoledora, que bien utilizada podría ser un revulsivo para todos, e incluso lograr cambios importantes a no muy largo plazo. Con que todos los desencantados fueran a votar y practicaran el voto nulo (bastarían unos rayajos en las papeletas), se producirían unos resultados espectaculares. Mientras que los partidos mayoritarios seguirían teniendo los mismos votos de sus seguidores, el índice de participación total sería muchísimo más alto que el habitual, esto evidenciaría que el partido que ganara, lo haría con un porcentaje muy bajo respecto del total de la participación ciudadana.
Concluyo: 1º) En general muchos queremos participar y votar, pero si la oferta es impresentable ó increible en la mayoría de los casos, se ira camino de la abstención cada vez en mayor medida.
2º) Un gran nivel de participación que ofreciera a la vista de todo el mundo, un porcentaje mayoritario de votos nulos, estaría evidenciando que un ganador con menor porcentaje que dichos votos nulos, no podría gobernar a su capricho.

El próximo día 25 de Mayo se celebrarán, en los 28 estados  de la Unión Europea ampliada, elecciones para el Parlamento Europeo, una cámara compuesta por 766 diputados de los que 54 serán españoles, de acuerdo con nuestra población. Esta cámara toma decisiones importantes  en forma de Directivas, que más tarde se transforman en leyes de cada país. Los diputados del Parlamento Europeo se agrupan por afinidades políticas, no por nacionalidades, estando actualmente la mayoría en manos de las derechas, que construyen una Europa a su medida. Es un parlamento que solemos considerar alejado de nuestros intereses, opaco, con poca repercusión en la política nacional, pero que dicta normas y leyes que se aplican en las naciones europeas. Parece que el Gobierno y los partidos políticos, tan interesados siempre en conseguir cotas de poder y representantes, no se deciden a plantear un debate de contenidos sobre las elecciones del próximo día 25 de Mayo y sobre Europa. No se atreven a exponerse porque suponen que tienen mucho que perder. Es como si no les importase que puedan votar muchos o pocos españoles, pues en cualquier caso, con cualquier porcentaje de votación, pueden conseguir sus objetivos, sus escaños.

Los ciudadanos podemos considerar que nuestra participación puede ser útil y, por tanto, votar. También podemos negar validez al sistema, responsable de las políticas económicas vigentes, absteniéndonos o votando nulo o en blanco. Hay razones para defender cualquiera de estas dos opciones. Como yo voy a votar, expondré algunas de las razones para ello (desde diversos supuestos y, por tanto, teniendo en cuenta el voto a candidaturas diferentes):


1.Cambiar la mayoría conservadora existente en el Parlamento Europeo dando paso a otras posibilidades, que podrían tomar la forma de una alianza entre la socialdemocracia y la izquierda, pues no son iguales todos los partidos.
2.Apoyar la presencia de una alternativa de izquierdas, o ecologista, a las grandes formaciones políticas.  
3.Apoyar una candidatura radical anticapitalista o de democracia asamblearia como forma de protesta y agitación.
4.Hacer ver a todos los españoles que el partido del actual Gobierno de Rajoy ha perdido ya la mayoría.
5.Votar más europa, pero no a la Europa de los financieros, sino a la Europa de los pueblos.
6.También, aunque yo no lo haría, votar a la actual mayoría europea conservadora.

También, para que todo esté algo más completo, expondré una razón para no votar, copiada de un compañero:

Como hemos comprobado en las pasadas elecciones generales ganadas por el PP, los partidos políticos una vez elegidos por sus programas hacen lo que quieren sin importarles sus promesas. Ceder tu voluntad durante 4 años a alguien o algo sin control ninguno sobre sus decisiones es una aberración, no se ajusta al derecho de los contratos, es una cláusula abusiva. Nadie votó por la subida de impuestos, la bajada de las pensiones, el despido libre, etc.
La única solución para la población es actuar de forma constante en todos los ámbitos sociales sin dejar a otras personas que decidan por nosotros.

Saludos.